Cómo jugar Cards Against Humanity: reglas y consejos clave
Aprende a jugar Cards Against Humanity con esta guía completa de reglas básicas, variantes divertidas y consejos para ganar.
Aprende a jugar Cards Against Humanity con esta guía completa de reglas básicas, variantes divertidas y consejos para ganar.
Amigos jugando alrededor de la mesa
Si estás buscando un
juego de mesa para adultosque ofrezca humor negro, risas garantizadas y creatividad, Cards Against Humanity es perfecto para ti. Este juego es ideal para grupos de 4 a 10 personas, lo que lo convierte en una excelente opción para reuniones sociales. Con una dinámica sencilla, pero muy divertida, involucra repartir cartas, elegir respuestas, y un jugador asume el rol de Czar, quien juzga las respuestas de los demás.
En esta guía, te explicamos cómo jugar paso a paso, cómo repartir las cartas y qué hacer en cada ronda. Además, te damos algunos consejos sobre cómo sacar el máximo provecho al juego y cómo personalizar las reglas para que cada partida sea única y entretenida. ¡Prepárate para convertirte en el alma de la partida y disfrutar de risas interminables!
Cards Against Humanity es un
juego de cartaspara adultos que se toma todo con humor… incluso lo más inapropiado. Fue creado en 2011 por un grupo de amigos que querían algo más divertido (y desvergonzado) para sus reuniones.
Con cartas negras que plantean preguntas provocadoras y cartas blancas con respuestas absurdas, el objetivo es simple: hacer reír al “Czar de las Cartas” con la combinación más ridícula o creativa.
Porque rompe el hielo como pocos juegos lo logran.
Porque no hay dos partidas iguales: todo depende de la creatividad del grupo.
Porque es ideal para sacar carcajadas entre amistades (siempre que todos tengan buen sentido del humor).
Si quieres saber más sobre las diferentes ediciones y cuál se adapta mejor a tu grupo, te invitamos a leer nuestra
Guía de ediciones de Cards Against Humanity: ¿cuál te conviene?, donde profundizamos en las opciones disponibles para que elijas la más adecuada para ti.
Antes de empezar a jugar, es bueno conocer de qué está hecho este caótico y divertido juego.
viene con dos tipos de cartas, y cada una tiene un rol muy específico en cada ronda.
A continuación, te explicamos cómo funciona cada una:
Estas son el corazón del juego. Cada carta negra plantea una frase incompleta o una pregunta provocadora que los demás jugadores deben completar.
Características principales:
Son las cartas que elige y lee el Czar en cada ronda.
Algunas requieren una sola respuesta, otras pueden pedir dos o más.
Tienen un tono irreverente, sarcástico o absurdo.
Cada vez que aparece una nueva carta negra, la partida se vuelve impredecible.
Estas cartas son tu “munición” para causar carcajadas. Las usas para completar lo que propone la carta negra.
Lo que debes saber:
Cada jugador recibe 10 cartas blancas al inicio.
Contienen frases, nombres o palabras disparatadas.
Puedes combinarlas para lograr respuestas aún más graciosas (cuando la carta negra lo permite).
La clave está en elegir la respuesta que creas que más va a hacer reír al Czar. ¡Ahí es donde empieza la verdadera competencia!
Caja de Cards Against Humanity
Aprender a jugar Cards Against Humanity es fácil. En pocos minutos, ya puedes estar riéndote con tus amigos y compitiendo por la mejor carta.
Sólo necesitas reunir al grupo, repartir las cartas… ¡y dejar que fluya el humor más incorrecto!
Este juego es flexible, pero entre más personas, más divertido se vuelve.
Lo ideal es jugar entre 4 y 10 personas.
También se puede jugar con grupos grandes (hasta 20 o más).
Lo importante es que todos se sientan cómodos con el tono del juego.
Antes de comenzar, hay que hacer una preparación rápida:
Baraja bien ambos mazos (cartas negras y blancas).
Cada jugador recibe 10 cartas blancas.
Las cartas negras se colocan en un mazo al centro.
Cada ronda tiene una dinámica sencilla pero muy entretenida. Te explicamos los pasos clave:
El rol del Czar de las Cartas
Alguien del grupo comienza siendo el Czar (juez de la ronda).
Ese jugador toma una carta negra y la lee en voz alta.
No participa con respuestas, solo evalúa las de los demás.
Cómo se seleccionan las respuestas
Los demás jugadores eligen una carta blanca de su mano.
La carta debe completar o responder lo que propone la carta negra.
Las entregan al Czar de forma anónima (puede ser boca abajo o en una pila).
¿Cómo se gana una ronda?
El Czar lee todas las respuestas en voz alta.
Luego elige la que le parezca más graciosa, creativa o absurda.
El jugador que envió esa carta gana la ronda y se queda con la carta negra como punto.
Después, el rol de Czar pasa al siguiente jugador y comienza una nueva ronda.
Aunque Cards Against Humanity se basa mucho en el humor improvisado, sí hay algunas reglas que todos deben seguir para que la partida fluya bien.
Aquí te dejamos un resumen rápido para que no se te pase nada:
Se reparten 10 cartas blancas a cada jugador al comenzar.
En cada ronda, uno de los jugadores es el Czar de las Cartas.
El Czar saca una carta negra, la lee en voz alta y espera respuestas.
Los demás jugadores eligen 1 carta blanca (o más, si la carta negra lo indica).
El Czar lee todas las respuestas en voz alta y elige la más divertida.
El ganador se queda con la carta negra como punto.
El rol de Czar rota en cada ronda, siguiendo el sentido de las agujas del reloj.
El juego puede terminar cuando alguien alcanza cierta cantidad de puntos o cuando ya no quieran más risas.
Una de las mejores cosas de Cards Against Humanity es que puedes adaptarlo a tu estilo. Si ya dominas las reglas básicas, prueba estas variantes caseras para darle un giro inesperado al juego.
Son ideales para grupos que ya han jugado antes o simplemente quieren algo diferente.
¿Una carta blanca no es suficiente? Esta variante sube el nivel del caos.
Si una carta negra lo indica (o si el grupo lo decide), los jugadores deben elegir 2 cartas blancas para completar la frase.
Las cartas se colocan en el orden en que se deben leer.
El resultado suele ser aún más absurdo… y mucho más gracioso.
Si prefieren un juego más democrático, esta variante es para ustedes.
En lugar de tener un Czar que decide, todos los jugadores votan por la respuesta que más los hizo reír.
Cada quien puede votar una vez (sin votar por su propia carta).
La carta con más votos gana la ronda.
¿Quieres premiar el ingenio? Esta variante lo hace posible.
Si una respuesta fue particularmente creativa, arriesgada o ingeniosa, el grupo puede decidir darle una carta negra extra como punto de bonificación.
Se puede aplicar sólo una vez por partida o cuando el grupo lo considere justo.
Si ya sabes todas las cartas de memoria, es hora de renovar tu mazo.
Algunas expansiones de este juego incluyen:
perfecta para reuniones familiares muy poco
Edición Internacional: con referencias adaptadas a distintos países.
Ediciones temáticas (geeks, política, celebridades): ideales para públicos específicos.
Puedes mezclar las cartas con el juego base y seguir jugando sin límites.
Cards against Humanity Expansion Out of Line
Aunque Cards Against Humanity no es un juego de estrategia como tal, sí hay ciertos trucos que pueden ayudarte a destacar y ganar más rondas. La clave está en leer el ambiente, entender el humor de tus amigos y, sobre todo, ¡arriesgarte a ser creativo!
No siempre gana la carta más grosera. A veces, lo sutil es lo más efectivo. Ten en cuenta:
Piensa en quién es el Czar y qué tipo de humor tiene.
Juega con el contraste o el absurdo para sorprender.
Si tienes dos cartas buenas, guarda una para la próxima ronda (si aplica).
Las combinaciones inesperadas suelen ser las más memorables.
Ser el Czar no es sólo leer cartas... también es saber cómo mantener la energía del grupo.
Consejos para hacerlo bien:
Lee todas las respuestas con entusiasmo (eso mejora la experiencia).
No te dejes influenciar por amistades; vota por la que realmente te hizo reír.
Si hay un empate, puedes hacer una segunda ronda de lectura o votar a mano alzada.
Mantén el ritmo: un Czar ágil hace que la partida no se detenga.
¿Van a jugar más de 10 personas? Genial, pero hay algunas cosas que te ayudarán a que todo fluya mejor:
Reduce el número de cartas en mano (de 10 a 7, por ejemplo) para acortar tiempos.
Usa un reloj o cronómetro para limitar el tiempo de respuestas.
Designa a alguien que recoja y baraje las respuestas para evitar confusiones.
Considera usar la variante de votación grupal en vez del Czar tradicional.
Cards Against Humanity no es solo un juego, es una experiencia que saca carcajadas, rompe el hielo y deja anécdotas inolvidables. Su irreverencia lo hace único, pero su valor real está en las conexiones que crea entre personas.
Disfrutarlo al máximo implica saber adaptarlo al grupo, reírse sin juzgar y respetar los límites de los demás. Porque el mejor juego es aquel donde todos se divierten sin sentirse incómodos.
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noches de juegosy risas garantizadas.