BYD Dolphin Mini vs. JAC E10x: ¿cuál conviene más por el precio y características?

Actualmente, la conversación sobre movilidad eléctrica en México ha cambiado de manera radical. Hoy, el acceso a un auto de baterías ya no es un sueño lejano, gracias a la llegada de competidores con una propuesta de valor sumamente atractiva.  Dos de los protagonistas más importantes en este nuevo escenario son, sin duda, el

y el JAC E10X. 

Ambos buscan conquistar el mismo terreno: el del conductor urbano que desea dar el salto a una movilidad más limpia y tecnológica sin desfalcar su cartera.

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Puesto que la decisión de compra va mucho más allá del precio, hemos preparado un análisis detallado para desgranar qué ofrece cada uno, cuáles son sus fortalezas y en qué puntos se diferencian.  Este es el versus entre la apuesta de

y la de

.

De esta forma, se puede tener una visión más clara sobre cuál de estos dos modelos que entran en la categoría de

se adapta mejor al estilo de vida.

El recién llegado BYD Dolphin Mini irrumpe en el mercado con argumentos muy sólidos. Su diseño le otorga una personalidad fresca y dinámica. Sin embargo, su verdadero diferenciador está en la estrategia de producto. BYD entiende que no todos los conductores tienen las mismas necesidades, por lo que ofrece dos variantes.

La primera, la versión de entrada, está pensada para un uso primordialmente citadino, mientras que la versión Dolphin Mini Plus va un paso más allá, entregando mayor autonomía gracias a una batería de mayor capacidad y un equipamiento más robusto. Esta dualidad le permite cubrir un espectro más amplio de posibles compradores. 

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En su interior, la sensación es de un auto de un segmento superior, destacando su ya característica pantalla multimedia giratoria de 10.1 pulgadas compatible con Apple CarPlay y Android Auto.

Este modelo de JAC no es un novato; lleva ya un tiempo circulando en las calles mexicanas y eso le confiere una ventaja de posicionamiento. Se presenta con una sola versión, una fórmula directa y sin complicaciones que apunta a un precio sumamente competitivo. 

Uno de sus principales estandartes es que se trata de un vehículo “Hecho en México”, ensamblado en la planta de la marca en Ciudad Sahagún, Hidalgo, un factor que para muchos compradores es sinónimo de confianza y facilidad para conseguir soporte y refacciones.

Su diseño es funcional y agradable, con la posibilidad de carrocería bitono que le añade un toque de personalización. Aunque su propuesta tecnológica puede parecer más conservadora frente a su rival, cumple con creces para el día a día, ofreciendo una conducción ágil y un enfoque práctico. Su batalla es ser el punto de entrada más racional y accesible a la electromovilidad.

Obviamente, el corazón de cualquier eléctrico es su batería, y aquí encontramos una bifurcación importante. En el caso del

está equipado con un motor de 60 caballos de fuerza y una batería de 31.4 kWh que le permite alcanzar hasta 360 kilómetros de autonomía en modo Eco Drive. Es una cifra muy respetable para recorridos urbanos y periurbanos.

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Por su parte, el BYD Dolphin Mini en ambas versiones monta un motor más potente de 74 caballos de fuerza, lo que se traduce en una respuesta más enérgica. En la versión de entrada, con su batería de 30.08 kWh, homóloga 300 kilómetros, mientras que el Dolphin Mini Plus, con su batería de 38 kWh, eleva la cifra hasta los 380 kilómetros. 

Esta última versión se perfila como la opción ideal para quienes realizan trayectos más largos con frecuencia o simplemente desean la tranquilidad de una mayor reserva de energía. En cuanto a la carga rápida, ambos modelos presentan tiempos similares, recuperando del 30% al 80% en aproximadamente 30-40 minutos.

Al abrir la puerta es donde las filosofías de cada marca se hacen más evidentes. A bordo del Dolphin Mini, el interior ofrece materiales de alta calidad y un ambiente tecnológico, donde la pantalla y el comando de voz son los protagonistas. La conectividad es total con Apple CarPlay y Android Auto de serie. La versión Plus incluso añade un práctico cargador inalámbrico de 50w para smartphones.

Ahora bien, el JAC E10X ofrece un interior bien resuelto, con asientos en piel sintética y una pantalla de 10.25 pulgadas que, si bien no tiene la versatilidad de la de su rival, cumple su función con radio, Bluetooth y conexión USB. 

Al igual que en el modelo de BYD, la cabina ofrece el espacio correcto para cuatro pasajeros, aunque las dimensiones ligeramente mayores del Dolphin Mini, sobre todo en la distancia entre ejes, le dan una leve ventaja en habitabilidad.

En un segmento tan sensible al precio, la seguridad a menudo puede verse comprometida. Afortunadamente, ambos vehículos cuentan con frenos de disco en las cuatro ruedas con ABS y asistente de frenado de emergencia, así como control de estabilidad y asistente de arranque en pendientes. La gran diferencia radica en el número de bolsas de aire.

El JAC E10X incorpora dos bolsas de aire frontales. El BYD Dolphin Mini, en su versión de entrada, ya lo supera con cuatro (frontales y laterales). Y aquí es donde el Dolphin Mini Plus toma una ventaja considerable al ofrecer seis bolsas de aire (frontales, laterales y de cortina), un equipamiento de seguridad pasiva mucho más completo que puede ser el factor determinante para muchos, especialmente para quienes viajan con la familia.

La elección final, como es natural, recae en las prioridades y el presupuesto de cada persona. No hay un ganador absoluto, sino dos propuestas excelentes para perfiles distintos.

El JAC E10X ($371,000) es una compra inteligente y pragmática. Es perfecto para quien busca el precio más bajo posible para un eléctrico nuevo, con el respaldo de una marca establecida y ensamblado localmente, ideal para un uso principalmente urbano.

El BYD Dolphin Mini ($399,800), y especialmente el Dolphin Mini Plus ($415,800), es para el conductor que está dispuesto a invertir un poco más a cambio de un paquete tecnológico superior, mejores acabados, un manejo más dinámico y, fundamentalmente, un equipamiento de seguridad más robusto. La versión Plus es, por una diferencia de precio razonable, una de las ofertas más completas del mercado actual.

Independientemente de la decisión, explorar las distintas opciones es fundamental. Invitamos a revisar el

, donde se puede encontrar el modelo que se acople perfectamente a la necesidad y presupuesto.