BYD King vs BYD Shark: Precio en México y características

, una marca de autos china con menos de dos años de presencia en México, ha experimentado una notable expansión en el mercado, consolidando su presencia a través de una gama de modelos caracterizada por diseños contemporáneos, un elevado nivel de equipamiento tecnológico y una clara orientación hacia la movilidad electrificada. 

Dentro de su portafolio de productos, BYD ofrece dos modelos que se ubican en dos segmentos clave: el sedán

. Si bien estos vehículos atienden a segmentos de mercado distintos, comparten una base tecnológica fundamental al incorporar un sistema híbrido enchufable (PHEV). 

Este sistema les confiere la capacidad de operar en modo totalmente eléctrico durante distancias significativas, complementado por un motor de combustión interna para mayor autonomía y versatilidad. 

A continuación, se presentan las características técnicas, prestaciones, eficiencia y posicionamiento de precio de ambos modelos, con el fin de evaluar su propuesta de valor.

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Su estrategia es bastante clara: ofrecer un

, con las ventajas de un híbrido enchufable, pero a un precio que normalmente asociamos a un sedán convencional. 

Aquí es donde la cosa se pone interesante y es crucial entender la diferencia. Un híbrido “normal”, como el popular

, recarga su pequeña batería principalmente con la frenada regenerativa y el motor de gasolina. Debido al tamaño de la batería, la autonomía eléctrica es muy limitada, apenas unos pocos kilómetros a baja velocidad. 

En cambio, un híbrido enchufable o PHEV (Plug-in Hybrid Electric Vehicle), como este King, tiene una batería de mayor capacidad que debe enchufarse a la corriente eléctrica, como si fuera un coche 100% eléctrico.

¿Qué significa esto en la práctica? Teóricamente, el BYD King promete hasta 50 kilómetros en modo puramente eléctrico. Si los traslados diarios son menores a esa distancia y se carga cada noche (tarda unas dos horas en un enchufe de 220 volts), se podría pasar la semana sin gastar una gota de gasolina. 

Y si se tiene paneles solares en casa, el costo por kilómetro se desploma. Este es el gran “plus” del PHEV: eficiencia eléctrica para el día a día, pero sin la “ansiedad de rango” de un eléctrico puro para viajes largos, ya que siempre tienes el motor de gasolina de respaldo.

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Claro que, para sacarle todo el jugo a esta tecnología, se requiere disciplina. Si no se enchufa regularmente, básicamente se estará cargando con el peso extra de una batería más grande sin aprovechar su principal ventaja, y su eficiencia dependerá únicamente del sistema híbrido tradicional y el motor a gasolina.

En cuanto a potencia, el Byd King combina su motor eléctrico con uno de gasolina para entregar 205 caballos de fuerza totales. No es un deportivo, pero su aceleración de 0 a 100 km/h en 7.9 segundos es más que respetable para un sedán de su tipo y tamaño. Su autonomía combinada, usando gasolina y electricidad, es de casi 1,200 kilómetros, con un consumo promedio rondando los 25 km/l cuando el sistema híbrido trabaja de forma óptima.

Por dentro, sigue la fórmula BYD: una gran pantalla central giratoria (12.8 pulgadas) compatible con Apple CarPlay y Android Auto, cuadro de instrumentos digital y un nivel de equipamiento bastante completo para su única versión, que incluye rines de 17 pulgadas, luces LED y seis bolsas de aire. Hay que mencionar que sus 4.7 metros de largo lo hacen más espacioso que un

Prius

, por ejemplo, y su cajuela de 450 litros es bastante generosa.

Con un precio de 499,800 pesos, el BYD King se planta como una opción muy tentadora. Ofrece tecnología PHEV, buen espacio y equipamiento a un costo que desafía a híbridos o sedanes convencionales. Suena como una jugada maestra para quien busca maximizar eficiencia y tecnología a un precio accesible, siempre y cuando esté dispuesto a adoptar el hábito de enchufarlo.

Si damos un giro de 180 grados, nos topamos con la BYD Shark. Esta pickup busca hacerse un hueco en un segmento muy competido, pero lo hace con argumentos muy diferentes a los tradicionales. Aunque su diseño frontal recuerda inevitablemente a gigantes como la

, sus dimensiones (5.4 metros de largo) la ubican más bien en el terreno de las medianas, como una

. En Mercado Libre puedes comprar el vehículo que se adapte a tus necesidades.

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Lo curioso es que, a pesar de ser mediana por fuera, la BYD asegura que su distancia entre ejes, similar a la de una pickup grande, le otorga un espacio interior, sobre todo en la segunda fila, más propio de categorías superiores. Es una propuesta interesante: maniobrabilidad de mediana, habitabilidad de grande.

Por dentro, la Shark también apuesta por la tecnología y una percepción de calidad. Destaca nuevamente la pantalla giratoria, el panel de instrumentos digital, y añade detalles como Head-Up Display, cámaras con visión de 540 grados (sí, 540) y hasta llave digital vía NFC en el celular.

Pero el corazón de la Shark es, una vez más, su sistema PHEV, aunque llevado a otro nivel. Aquí, el objetivo es priorizar la conducción eléctrica lo máximo posible. Aquí, el motor 1.5 litros turbo a gasolina actúa muchas veces como generador para la batería, aunque también puede impulsar las ruedas directamente o en conjunto con los motores eléctricos cuando se requiere máxima potencia. 

Esta configuración le permite entregar más de 430 caballos de fuerza, una cifra brutal que le permite acelerar de 0 a 100 km/h en menos de 6 segundos, más rápido que muchas pickups V8.

Su batería es considerablemente más grande que la de la King, lo que le permite una autonomía eléctrica de hasta 100 kilómetros. Esto significa que muchos trayectos urbanos o incluso rutas cortas de trabajo podrían hacerse sin consumir combustible. 

Cuando la batería se agota o se necesita más rango, el sistema híbrido entra en acción, ofreciendo una autonomía total cercana a los 850 kilómetros. Incluso en el escenario menos favorable (batería baja), el consumo de gasolina ronda los 13 km/l, una cifra excelente para una pickup de esta potencia y peso. Si se mantiene la batería con carga, ese consumo mejora notablemente.

Esta Shark no olvida su naturaleza de

: puede arrastrar hasta 2.5 toneladas y cargar 835 kg en su batea, que viene con recubrimiento protector. Y un detalle muy práctico: su sistema híbrido permite funcionar como una fuente de energía (V2L - Vehicle-to-Load), para conectar herramientas o electrodomésticos.

BYD ofrece a la Shark en México por medio de dos versiones:

por 899,980 pesos y

por 969,800 pesos. Esto la coloca en la parte alta del segmento de pickups medianas, compitiendo por precio incluso con algunas versiones de entrada de pickups grandes. Puedes revisar Mercado Libre para ver las opciones disponibles.

Autor: Luis Hernández del Arco