Cómo es el Toyota Yaris: de esos autos que sin tanto ruido son garantía

Al ir en la búsqueda de un auto que simplemente cumpla, que no dé problemas y que, con el paso de los años, siga sintiéndose como una inversión inteligente, es inevitable que ciertos nombres vengan a la mente. Entre ellos, aunque quizás no con el estruendo mediático de otros, figura con méritos propios el

, modelo disponible tanto en carrocería sedán como hatchback.

Al igual que sus competidores como el

,

o el

(todos disponibles en Mercado Libre), este auto se ha labrado una reputación a pulso. Vaya que tiene con qué, si lo comparamos con algunos competidores que llevan el emblema de una marca de autos china.

Hablemos claro: el Yaris no es el auto que encabeza las listas de los más vendidos mes a mes, ni tampoco es el que genera más conversaciones en las reuniones. Pero, y aquí viene lo interesante, es precisamente esa discreción la que esconde una de sus mayores virtudes: una fiabilidad a toda prueba. 

Pasan los años, los kilómetros se acumulan en el odómetro, y este

sigue rodando con la misma entereza del primer día. Es de esos compañeros de viaje que rara vez, por no decir nunca, van a dejar a uno tirado.

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Este atributo, que parece tan básico, es en realidad un tesoro en el mundo automotriz actual. Mientras otros modelos pueden empezar a mostrar achaques con el tiempo, el Yaris se mantiene firme. 

Por esta razón, el valor de reventa del Toyota Yaris suele ser bastante bueno, porque quien busca un auto usado sabe que adquirir un Yaris es comprar tranquilidad. A esto se suma otro punto no menor: no figura entre los modelos más buscados por los ladrones de autopartes, lo cual, en el día a día, se traduce en una preocupación menos.

Si analizamos su desempeño, el Toyota Yaris se presenta como una solución sumamente equilibrada. Su tamaño compacto lo convierte en un rey para la jungla de asfalto. Encontrar lugar para estacionarse es más sencillo, y maniobrar entre el tráfico denso se siente ágil. Esta agilidad se debe, en parte, a una dirección que responde con precisión y a una suspensión que, sin ser deportiva, mantiene una firmeza adecuada.

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Para ese andar, encontramos un motor de cuatro cilindros que entrega 105 caballos de fuerza y 102 libras-pie de torque. Estas cifras, que pueden parecer modestas para algunos, están pensadas con un objetivo claro: la eficiencia. 

Se puede optar por una transmisión manual de cinco velocidades o una continuamente variable (CVT), ambas enfocadas en exprimir cada gota de gasolina. Por consiguiente, la economía de combustible es uno de sus puntos más fuertes, un alivio para el bolsillo en tiempos donde el precio en las gasolineras es una constante preocupación.

Y aunque su hábitat natural es la ciudad, si se presenta la oportunidad de salir a carretera, el Yaris no defrauda. Ciertamente, no es un bólido pensado para batir récords de velocidad, pero para viajes a ritmos legales y constantes, cumple con creces, permitiendo disfrutar del paisaje sin sentirse limitado.

Al sentarse al volante, la experiencia de conducir un Yaris resulta bastante placentera. Como se mencionaba, la dirección es precisa y la suspensión tiene un buen balance. En el interior, el espacio es decente para un vehículo de su segmento, permitiendo que cuatro adultos viajen con relativa comodidad. 

Todo el diseño interior es atractivo y está repleto de características que hacen más amenos los trayectos, incluyendo un sistema de infoentretenimiento que, por lo general, resulta intuitivo y fácil de operar.

Es cierto que su único motor de cuatro cilindros, si bien eficiente, sacrifica algo de potencia en aras del ahorro de combustible. Aquellos que busquen una respuesta más contundente al pisar el acelerador quizás sientan que le falta un poco de brío. 

No obstante, para el conductor promedio que valora la economía y la suavidad de marcha por encima de las prestaciones puras, esta configuración resulta más que adecuada. Con un precio que arranca desde los 317,000 pesos, se posiciona como una opción muy interesante.

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En definitiva, el Toyota Yaris es ese tipo de auto que, sin necesidad de grandes alardes ni campañas publicitarias ensordecedoras, se ha ganado un lugar en el corazón –y en el garaje– de muchos conductores por las razones correctas: es confiable, duradero, económico y mantiene un buen valor con el tiempo. Es, sin lugar a dudas, una garantía sobre ruedas.

Si se está considerando un auto que brinde tranquilidad y eficiencia, el Toyota Yaris merece toda la atención. Y bueno, no hay que olvidar explorar el amplio catálogo de autos usados en Mercado Libre, donde seguramente está el modelo de Yaris que mejor se acople a las necesidades y presupuesto.

Autor: Luis Hernández del Arco