Explorando el futuro de la cocina: estufa eléctrica vs. estufa de inducción

Los avances tecnológicos han llegado a todos los segmentos que uno pueda imaginarse, incluso también a la cocina en sí. Y esto no tiene que ver con los electrodomésticos que uno pueda encontrar en este espacio de la casa, sino con la

.

Actualmente, hay diferentes modelos y diseños que se han vuelto muy pretendidos, entre los que se incluyen los eléctricos y los de inducción. Y claro, esto genera dudas y debates al momento de tener que adquirir una nueva. ¿Cuál es la mejor opción? ¿Qué debo tener en cuenta?

Al pensar en una

, probablemente en lo primero que uno piense sea en una

, destacada por su potencia y su capacidad de trabajar con grandes cantidades de comida. Sin embargo, estos productos dependen de una fuente de gas para funcionar y suelen ser costosas, por lo que se desarrollaron nuevos sistemas de cocción. Así, gracias a las innovaciones de diferentes empresas, los usuarios podrán elegir, también,

y de inducción.

Dentro de estas tecnologías, destacadas por su seguridad, ecología y ahorro, se pueden distinguir las cocinas eléctricas y las estufas de inducción. Se dividen en categorías como:

. 

Hay que tener en cuenta que estas cocinas están compuestas por una superficie de resistencia radiante, la cual se conecta a la energía eléctrica. La parte superior queda recubierta por un vidrio que suele ser negro, de vitrocerámica (permite que la radiación infrarroja pase bien), para que la apariencia sea mucho más interesante. 

Además, este material logra que la cocina se caliente con rapidez, pero solo en la parte de la placa, mientras el resto de la superficie se mantiene fría. Gracias a esto y a su superficie lisa, son fáciles de limpiar.

Al tener que evaluar y considerar cuáles son los ítems que hacen que las nuevas cocinas eléctricas se vuelvan destacadas, entonces hay varias cuestiones que deberán tenerse en cuenta.

Algunos puntos destacados de las estufas eléctricas son:

Por un lado, estos productos funcionan gracias a resistencias eléctricas que distribuyen el calor de manera uniforme. A esto se le suma que su superficie de cocción puede ser tanto una placa, como así también un quemador eléctrico.

Algo muy valorado es que la temperatura puede regularse gracias a los termostatos (que funcionan según paneles táctiles o con ruleta), lo cual permite que las personas puedan cocinar sus platos favoritos a la temperatura indicada de una manera muy sencilla. 

Aunque es cierto que, a veces, las cocinas eléctricas tardan un cierto tiempo en calentarse, sobre todo si se las compara con otros modelos como las estufas a gas.

Entre tantas cosas, cabe señalar que son muy seguras, ya que descartan los peligros de una fuga de gas. 

También son fáciles de usar, con un sistema intuitivo que incluye dibujos o íconos para que todo sea más simple. Además, la limpieza también es muy sencilla.

A todo esto, se le suma que, en la actualidad, hay modelos “eco”, que permiten tener un ahorro de energía significativo. Y todo esto con una instalación y conexión que se puede hacer en tan solo unos minutos.

A la hora de considerar cuál

parrilla

eléctrica es mejor para tí, es recomendable observar la potencia, ya que esto afectará el tipo de comida que podrás preparar y el tiempo de cocción en el que estará lista.

Así, las opciones más económicas suelen ofrecer voltajes más bajos, por lo que no serán adecuadas para cocinar carnes. Suele recomendarse una potencia de aproximadamente 2000 vatios.

Además de observar factores como la antiadherencia, es aconsejable tener en cuenta material (suelen ser de aluminio o de aleación), tamaño, forma y movilidad (un panel extraíble será más fácil de limpiar que uno fijo).

Las cocinas de este estilo se han vuelto muy pretendidas en el mercado actual, sobre todo por los jóvenes que intentan buscar energías alternativas al momento de preparar sus menús favoritos.

Las

funcionan con imanes que se estimulan mediante la electricidad. Se genera un campo electromagnético que permite que el calor se traspase a los recipientes metálicos. De esta manera, logra que los alimentos se calienten y cocinen rápidamente, lo que hace que este tipo de estufas sean reconocidas por su eficacia, tanto en velocidad como en consumo energético.

Si bien comparten ciertos factores con las estufas eléctricas (tales como la facilidad de uso y la seguridad), algunos factores que las distinguen son:

Cabe destacar que, al ser un modelo de cocina con electromagnetismo, lo que hace es calentar los recipientes adecuados para este sistema. Por lo tanto, se necesitará contar sí o sí con recipientes metálicos al momento de cocinar. 

De esta manera, los utensilios deberán ser ferromagnéticos (al menos en la base). Productos de cerámica, aluminio, terracota, vidrio y cobre no serán compatibles con este tipo de estufas. 

La temperatura se puede regular mediante los controles digitales que posee. La misma se transfiere directo al recipiente (son capaces de detectar su forma y tamaño), por lo que la superficie que la rodea permanece siempre fría.

Otro punto a su favor es que puede cumplir con su tarea más rápido que las cocinas eléctricas. Así, algunos modelos son hasta 50% más rápidos que una parrilla normal.

Algunas de las ventajas más notables de este tipo de productos es su facilidad tanto de limpieza como de uso, además de no producir un calor residual. 

Las estufas de inducción son, también, seguras: tanto por la reducción en la posibilidad de fugas de gas y de quemarse (al aplicar calor únicamente a la superficie metálica con la que entra en contacto, el usuario tiene menos riesgo de lesionarse) como en la eliminación de ondas electromagnéticas (tales como las de los microondas). 

Una de las cuestiones más destacadas de esta clase de cocinas es que su índice de consumo es de alrededor de un 30% o 40% menos que las eléctricas, siendo este un punto verdaderamente favorable que los usuarios deberán tener en cuenta al momento de analizar puntos previos al momento de llevar adelante la compra.

Si bien ambos tipos de cocina comparten ciertas características, como la seguridad y la facilidad tanto de uso como de limpieza, la elección final estará determinada, mayormente, por los requisitos y demandas de cada usuario con respecto a su cocina. 

Así, las eléctricas proponen un desempeño muy similar a las cocinas tradicionales una vez que su resistencia está caliente. Ofrecen una gran variedad en cuanto a lo que paneles para cocinar se refiere, además de un

abanico

de potencias y costos.

Mientras tanto, las estufas de inducción también contarán con sus puntos favorables al momento de cocinar, tales como una mayor eficiencia energética, un tiempo de cocción más breve y un gran rango de temperaturas para elegir el ideal para tu receta. 

Además, son sistemas doblemente seguros, ya que, por un lado, reduce la posibilidad de quemarse al calentar únicamente la superficie utilizada y, además, no emite gases ni ondas que puedan afectar al usuario.

A la hora de cambiar la cocina, la

estufa

es una elección fundamental. De acuerdo a las demandas y recetas preferidas, a la cantidad de personas y a las características específicas del hogar (desde espacio hasta consumo eléctrico), los usuarios podrán elegir entre una gran variedad de productos para alcanzar comidas perfectas.

Ante una situación como esta, lo mejor será ingresar a Mercado Libre. Allí, los usuarios tendrán la posibilidad de comparar los productos que sean de su interés, observando los precios, como así también las especificaciones y las características técnicas más destacadas. Otra ventaja es el hecho de poder hacerles preguntas a los expertos que te atenderán de manera virtual, y la opción de leer las reseñas de personas que ya tienen una de estas estufas.

Con todas estas cuestiones, se podrán dejar las dudas de lado y finalmente llevar a cabo la tan ansiada compra. Una vez que estés decidido, será momento de hacer los clics necesarios, para de ese modo proceder a tener tu próxima estufa y destacarte en la cocina al momento de preparar tu menú favorito.