El Motorola G100 fue un modelo que dejó huella en 2021 gracias a su excepcional potencia y precio competitivo. En su momento, este
smartphonese convirtió en uno de los más buscados por ofrecer características que, hasta entonces, eran exclusivas de gamas más altas.
Acompáñanos a ver en el siguiente artículo por qué este modelo representó un hito dentro de la serie
, rompiendo las barreras y redefiniendo lo que un teléfono de gama media podía ofrecer.

DESCUBRE EL MOTOROLA G100
Motorola G100: Un gigante que brilló en 2021
Cuando hablamos de
Motorola, nos referimos a una marca que ha sido sinónimo de innovación y accesibilidad a lo largo de los años. Con un legado que abarca desde los primeros teléfonos móviles hasta los smartphones más modernos, Motorola ha sabido adaptarse a las tendencias del mercado sin perder su esencia.
En 2021, la compañía sorprendió con el lanzamiento del
, un dispositivo que se presentó como su buque insignia en la popular serie Moto G. Este modelo marcó un antes y un después al introducir características premium en un rango de precio competitivo, rompiendo barreras entre los teléfonos de gama media y los de gama alta.
El
G100 destacaba no solo por su potente hardware, sino también por su enfoque en brindar una experiencia completa a usuarios exigentes sin requerir una inversión excesiva.
Fue de los primeros teléfonos en utilizar la plataforma Qualcomm Snapdragon 870, destacándose en rendimiento, conectividad 5G y capacidades multitarea. Ahora veremos a fondo cada uno de los aspectos que hicieron único a este dispositivo.
Un diseño robusto y funcional
El Motorola G100 aseguró funcionalidad y estética en su diseño. Con un cuerpo fabricado en plástico de alta calidad y bordes redondeados, el dispositivo ofrecía una sensación sólida al tacto, ideal para un teléfono pensado para el día a día.
Su acabado trasero presentaba un degradado de colores llamativos que, dependiendo de la luz, ofrecía reflejos dinámicos, algo muy atractivo para el mercado joven y moderno al que apuntaba.
Con un peso de 207 gramos y un grosor de 9.7 mm, era un
más voluminoso que otros modelos, pero esto estaba directamente relacionado con su batería de alta capacidad.
Además, Motorola incorporó un lector de huellas dactilares en el lateral, integrado en el botón de encendido, una posición cómoda y ergonómica para desbloquear el dispositivo rápidamente.
Pantalla amplia y fluida
El Motorola G100 sorprendió con una pantalla IPS LCD de 6.7 pulgadas, que ofrecía una resolución Full HD+ (2520 x 1080 píxeles). Aunque no utilizó tecnología OLED, logró destacar por su tasa de refresco de 90 Hz, una característica que garantizaba transiciones suaves y una experiencia de uso más fluida, especialmente para juegos y navegación.
Motorola apostó por una relación de aspecto de 21:9, lo que hacía que el dispositivo fuera ideal para disfrutar de contenido multimedia, como series y películas. Además, su compatibilidad con HDR10 mejoraba los contrastes y ofrecía una representación de colores vibrantes, elevando la calidad visual pese a tratarse de un panel LCD.

Motorola G100
Rendimiento impecable
En su corazón, el Motorola G100 montaba el procesador Qualcomm Snapdragon 870, un chipset diseñado para ofrecer un rendimiento casi de gama alta en 2021.
Este procesador, con una velocidad de reloj de hasta 3.2 GHz, estaba respaldado por la GPU Adreno 650, garantizando un desempeño óptimo en juegos exigentes y aplicaciones pesadas.
El teléfono venía en configuraciones de 8 GB o 12 GB de memoria RAM LPDDR5, asegurando un manejo fluido del multitasking y la posibilidad de ejecutar varias aplicaciones simultáneamente sin interrupciones.
En cuanto al almacenamiento, ofrecía 128 GB o 256 GB, expandibles mediante tarjeta microSD, una característica cada vez menos común en el mercado, pero muy apreciada por los usuarios.
Cámaras versátiles y listas para todo
Uno de los puntos fuertes del Motorola G100 era su sistema de cámaras. En la parte trasera, el teléfono estaba equipado con un sensor principal de 64 MP con apertura f/1.7, que capturaba imágenes con gran detalle y colores vivos, incluso en condiciones de poca luz gracias al modo nocturno mejorado.
Este sensor estaba acompañado por un ultra gran angular de 16 MP, perfecto para capturar paisajes o fotografías grupales, y una cámara de profundidad de 2 MP que facilitaba retratos con efecto bokeh natural.
En el frente, Motorola innovó con un doble sistema de cámaras para selfies, compuesto por un sensor principal de 16 MP y un ultra gran angular de 8 MP, ideal para selfies grupales. Además, el dispositivo era capaz de grabar videos en resolución 6K, una característica poco común en su rango de precio.
Esta resolución 6K fue una cuestión más mediática que otra cosa, en realidad podemos decir que filmaba en 4K a 30 fps.
Batería de larga duración y carga rápida
Con una batería de 5000 mAh, el Motorola G100 aseguraba una autonomía excepcional, suficiente para un día completo de uso intensivo o incluso 2 días de uso moderado. Motorola complementó esta capacidad con la tecnología de carga rápida TurboPower de 20 W, que permitía recuperar un porcentaje significativo de la batería en pocos minutos.
Aunque algunos competidores ofrecían cargas más rápidas, la eficiencia energética del Snapdragon 870 y la optimización de software de Motorola ayudaron a equilibrar la experiencia sin comprometer la durabilidad de la batería.
El Moto G100, pionero en conectividad
El Motorola G100 fue uno de los primeros dispositivos de su gama en incorporar conectividad 5G, una característica que lo preparaba para el futuro de las telecomunicaciones.
También incluía Wi-Fi 6, garantizando velocidades más rápidas y estables en redes compatibles, además de Bluetooth 5.1 y NFC, ideal para pagos móviles y conexión rápida con otros dispositivos.
El dispositivo destacaba también por su compatibilidad con Ready For, una función exclusiva de Motorola que permitía conectar el teléfono a una pantalla externa y usarlo como una especie de computadora, ideal para productividad o entretenimiento.
Conclusión
El Motorola G100 rompió paradigmas al ofrecer características propias de la gama alta a un precio accesible. Su pantalla fluida, cámaras versátiles, potencia de procesamiento y batería de larga duración lo convirtieron en una opción destacada para quienes buscaban un dispositivo potente sin pagar de más.
A pesar de no ser perfecto, logró posicionarse como un referente en la evolución de la serie Moto G y como un ejemplo de lo que un smartphone puede ofrecer cuando se prioriza la relación calidad-precio. Hoy en día, sigue siendo recordado como un modelo que elevó las expectativas de lo que un teléfono en este rango de precio podía lograr.