Rolex vs Omega: ¿Qué reloj de lujo es mejor?

Para quienes son amantes de los lujos, en el detalle está la diferencia. Es por ello que no es lo mismo una u otra marca, ya que en todas, las propuestas son diametralmente opuestas. 

Los

no son ajenos a esta competencia, que en ese rubro, está ampliamente identificada entre los amantes de los Rolex, o los fanáticos de Omega. 

Sus propuestas son totalmente distintas, y en este artículo analizaremos pormenorizadamente cuáles son las principales diferencias, para que puedas elegir el tuyo teniendo en cuenta estos aspectos.

Tanto Omega como

Rolex

son dos empresas de relojería conocidas mundialmente, con más de cien años en el mercado. Omega es la más antigua de las dos, ya que cuando comenzó la producción de Rolex, la empresa de la “O” ya llevaba más de medio siglo en el mercado. 

Sin embargo, ambas han creado identidades muy distintas dentro del lujo: por un lado, Omega nació en el Comptoir d’établissage de la mano de Louis Brandt, en 1848, siendo un joven de tan sólo 23 años, en el pueblo Suizo de La Chaux-de-Fonds. Brandt viajaba por Europa llevando sus creaciones a sofisticados clientes; y allí comenzó a crecer la marca, que pronto cambiaría su nombre a Louis Brandt & Fils, cuando nacieron sus hijos.

En 1879, con la muerte de Louis Brandt, los hijos toman las riendas del negocio familiar y deciden trabajar mancomunadamente con el avance de la tecnología de la época: comienzan a introducir la mecanización de los relojes, y también, comienzan a equiparse con maquinaria moderna, inspirados en los métodos de fabricación americanos. Así pronto logran llegar a América con sus productos, y para 1889, ya se producían 100.000 relojes de la marca.

Luego, la fábrica continuó creciendo, y cambia su nombre a Omega en 1903, cuando los hermanos Brandt fallecen y se la dejan a sus seis descendientes directos, y la compañía pasa a llamarse S.A. Louis Brandt & Frère, Omega Watch Co. 

Por su parte, Rolex también fue fundada por un joven de 24 años llamado Hans Wilsdorf, que en conjunto con su cuñado Alfred Davis crearon en 1905 lo que luego se llamará Rolex. 

Si bien sus inicios datan en Londres, donde importaban movimientos fabricados en Suiza; en 1908, ya cambia su nombre a Rolex, que no es nada más ni nada menos que la combinación de cinco letras. Curiosamente, la marca se registra ese año, en el mismo pueblo que surgió Omega, en La Chaux-de-Fonds, Suiza.

Cabe destacar que la competencia entre ambas marcas es histórica, sin embargo, cada una tiene su hito histórico por el que serán recordadas: Los integrantes del equipo del Apolo 11 que llegó a la Luna, llevaban consigo un relojes Omega; mientras que Rolex patentó en 1931 el mecanismo de cuerda automática, lo que iniciará el camino para los relojes automáticos tal como lo conocemos ahora.

Es decir, cada marca cuenta su propia historia, y ambas son reconocidas mundialmente, sin embargo hay algunos puntos en los que alguna de las dos se destaca por sobre la otra. 

En este apartado encontrarás un análisis pormenorizado de los relojes de lujo de marca Omega.

Uno de los puntos más importantes es la calidad de los materiales en uso, ya que esto dará durabilidad a la pieza. En ese sentido, cabe destacar que ambas marcas son parecidas en este punto: ambas utilizan en la mayoría de sus relojes el acero inoxidable, lo que brinda resistencia y durabilidad a las piezas.

En ese sentido, cabe destacar que la artesanía de cada uno de los relojes en esta marca es menos rebuscada que en el caso de

, por lo que la producción de las piezas es mucho más rápida. 

En relación al movimiento de los relojes, que son las maquinarias compuestas por pequeñas partes que hacen al

reloj

funcionar, es allí donde se puede conocer la reserva de energía que poseen.

Esto es, el tiempo con el que cuenta cada maquinaria del reloj para dejar de funcionar, es decir, detenerse. Este detalle es un punto fundamental sobre todo para los coleccionistas, que buscan producción interna, algo que Omega no tiene y debe subcontratar a fabricantes de la misma.  

Al tratarse de objetos de lujo, su diseño no queda librado a la minuciosidad en los detalles y en la elección de materiales que se utiliza para cada colección. En ese sentido, Omega emplea oro rojo, amarillo y blanco, que combina con otros metales (como cobre y plata) para lograr detalles únicos en la confección de sus relojes, en los que también emplea acero, aluminio y titanio, que le permiten realizar piezas consistentes y duraderas.

Los

suelen ser más accesibles en cuanto a los precios de sus productos que los de Rolex, debido a que su producción es más “masiva”, aunque no por ello es totalmente accesible a todos (cabe recordar que se trata de relojes de lujo).

Los relojes Omega han llegado hasta la Luna, literal. Los tripulantes del Apolo 11 llevaban en sus muñecas relojes Omega, los speedmaster, que tuvieron una precisión mucho mejor que la de las estaciones espaciales.

Por otra parte, los Omega también fueron los relojes oficiales de los Juegos Olímpicos desde la edición Los Ángeles, de 1932, hasta los de Brasil 2016.

Finalmente, desde el año 1995, en adelante, las películas de James Bond han sido filmadas con relojes Omega, en su modelo Seamaster.

Además de acompañar algunos momentos históricos notables, la marca fue responsable del lanzamiento de modelos como Omega Speedmaster Professional Moonwatch, un ejemplar robusto y preciso que hace homenaje al Speedmaster Professional Chronograph usado en el aterrizaje en la luna. 

Esta empresa también cuenta con la línea Constellation que, después de llegar al mercado en 1952, fue una de las compras de un Elvis Presley joven debido a sus características de lujo. Dentro de esta categoría, se puede encontrar el Constellation Co-Axial, destacado por su variedad de colores que, aún así, se mantienen fieles a su estética clásica.

El ya mencionado Seamaster también sigue vigente en el mercado, especialmente con su modelo Diver 300m, disponible en diferentes colores. Se destaca por su bisel giratorio unidireccional y su resistencia al agua, entre otras cosas. 

En este apartado encontrarás un análisis pormenorizado de los relojes de lujo de la marca Rolex.

En relación al uso de materiales, tal como decíamos en este apartado de la marca Omega, la mayoría de los relojes son fabricados con acero inoxidable; sin embargo, la marca desarrolló un acero especial conocido como 904L por lo que fue reconocida por las demás empresarios de la industria, ya que el mismo es más resistente a la corrosión, al óxido y a los rayones.

En el caso de la artesanía en la confección de las piezas, Rolex es una empresa que dedica mucho tiempo de su producción a cuidar el detalle y buscar la perfección, por lo que la creación de piezas es mucho más lenta, y por ende, hay pocas unidades en el mercado, lo que hace crecer su valor, por la alta demanda de los mismos.

En los relojes Rolex, la maquinaria de los relojes están compuestas en el mismo lugar en el que se trabaja sobre las demás piezas que componen el

. En ese sentido, esta empresa se destaca por la prolijidad en sus labores, y por su minuciosidad en cada pieza, haciendo que esto la diferencie de Omega, aunque en capacidad de reserva, ambas marcas sean similares.

Tal como mencionamos en el apartado similar anterior, este es un punto en el que los coleccionistas hacen especial hincapié, por lo que si sos uno de ellos, sin dudas Rolex tiene un punto a favor en este apartado.

Rolex se ha convertido en tal imperio que es una de las pocas marcas, por no decir la única, que ha logrado producir oro y acero en su propia fundición, por lo que la hace particular en este punto.

Además de esos dos elementos, también utiliza en sus piezas acero Oystersteel, que es resistente e inoxidable, oro (amarillo, blanco y Everose), y platino; mientras que para su anillo de numeración emplea Cerachrom (cerámica patentada por Rolex) y en las correas de caucho utiliza la tecnología del elastómero (que fue denominada Oysterflex).

En este punto, Rolex cuenta con una pequeña ventaja por sobre Omega, debido a su producción más dedicada en cada una de las piezas puestas a la venta en el mercado.

Tal como se viene mencionando, Rolex es una marca lujosa. En ese sentido, no deja de ser exclusiva, lo que hace que sus relojes cuenten con precios a los que alcancen sólo unos pocos.

En relación con Omega, lo que cuesta un Rolex, suele ser el valor de dos o tres relojes de la otra marca, como para conocer la relación de precios entre ambas.

Por otra parte, una característica especial de quienes lograr hacerse de un Rolex, es que por lo general, la mayoría de los modelos adquieren un valor más alto que por el que lo compraste, punto que no sucede con los Omega.

Entre los principales hitos de la marca se pueden destacar: Rolex fue una de las primeras marcas fabricantes de relojes en conseguir la certificación cronómetro para un

reloj pulsera

.

También fue nombrado, en el 2003, como el reloj oficial y cronometrador de Wimbledon; mientras que, también es patrocinador oficial de los torneos de tenis de la serie ATP Masters 1000: el Masters de Shanghái, el Masters de París y el Masters de Montecarlo.

Finalmente, entre las principales personalidades que usan Rolex se encuentran Plácido Domingo, Juan Martín Del Potro, Yo-Yo Ma, Roger Federer, Gustavo Dudamel, y Ana Ivanovic, entre otros.

Dentro del catálogo de una marca que ha sido utilizada por estrellas dentro y fuera de la pantalla grande, deportistas y otras celebridades, se encuentran líneas como la Explorer, que cuenta con diferentes modelos (tales como el Explorer II o el Explorer 1016) que mantienen la estética robusta pero elegante inspirada en la aventura, por lo que han recibido el nombre de “el reloj de las cumbres”.

Los amantes de Rolex conocen al icónico

Rolex Submariner

que marcó la relación entre la empresa y el submarinismo pero, para aquellos dedicados al buceo, también serán célebres los Sea-Dweller y Deepsea, destacados por su resistencia.

Otros modelos clásicos de la marca incluyen los lanzamientos del hermético Oyster Perpetual y del famoso GMT-Master II.  

Si sos de los que prefiere tener un reloj caro, de

y con precisión en los detalles, tal vez Rolex sea la marca que más se ajusta a tus exigencias; mientras que si sos de los que prefieren los lujos pero sin ostentaciones, Omega sin dudas es el que más te interpelará.

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